Errata Naturae prepara la aparición de 'Hotel del Norte' de Eugène Dabit, obra en la que se inspiró la célebre película homónima de Marcel Carné

Hotel del Norte.

Eugène Dabit.

Traducción: Sara Álvarez Pérez.

Errata Naturae. Col: El Pasaje de los Panoramas.
Formato: 14× 21,5 cm.
184 páginas.
PVP: 16,50 €
Fecha de publicación: 19 de noviembre de 2012.

Por una vez vamos a empezar por el final y antes de resumir el argumento de la obra, como suelen hacer las editoriales al informar sobre sus novedades, nos vamos a centrar en la biografía del autor, dado que en este caso, como se verá enseguida, la trayectoria biográfica determina de un modo capital el texto que Errata Naturae pondrá a la disposición de los lectores a partir del próximo 19 de noviembre.

Eugène Dabit (Mers-les-Bains, 1898 – Sebastopol, 1936) nació en una familia obrera que, a pesar de vivir en Montmartre, París, quiso que su hijo llegara al mundo cerca del mar desplazándose de este modo hasta la costa para su nacimiento. En 1914, Émile Dabit, padre de Eugène, fue movilizado y su hijo tuvo que abandonar sus estudios y su formación en un taller de cerrajería para colaborar en los ingresos familiares. Limpiar las ventanas de los vagones de la línea Norte-Sur del metro por el día y hacer las veces de ascensorista en la estación Lamarck-Caulaincourt por la noche fueron las extenuantes dedicaciones de este chico de 16 años en aquel tiempo. Pero aún podría ser peor y en 1916, infausto año de Verdún, él mismo fue llevado al frente como radio-telegrafista, reparando las líneas durante los bombardeos.

Acabada la guerra Dabit hijo comenzó sus estudios de pintura. En la Académie Billoul entraría en contacto con sus nuevos camaradas, que le darían a conocer la literatura que tanto le influyó: Baudelaire, Rimbaud, Stendhal, Gide… Pronto comenzó a ganarse cómodamente la vida con un negocio de seda pintada, y gracias a los ingresos que obtenía con esta actividad y al préstamo de unos parientes, los padres de Eugène Dabit se convirtieron en propietarios del Hôtel du Nord –ya se entiende perfectamente la alusión inicial, ¿verdad?–, en el 102 del muelle de Jemmapes en París. Eugène se instaló también con ellos y ejerció a menudo como portero de noche, observando a la gente que allí vivía, e inspirándose para sus futuras novelas.

Resultado de estas peripecias, en 1929 aparecería Hotel del Norte, que obtuvo un éxito inmediato. En los los siguientes publicó también títulos como Faubourgs de Paris (1933), L’Île (1934) o Un mort tout neuf (1934), que Errata naturae publicará en el futuro, pero la fatalidad truncó antes de que llegara a cumplir los 40 años una mucho más que prometedora carrera y, de este modo, en 1936, durante un viaje de carácter literario realizado a la URSS por invitación de André Gide, contrajo la escarlatina y murió repentinamente el 21 de agosto en Sebastopol.

En Hotel del Norte –novela de gentes de paso, de amores y desamores, de pequeñas y grandes tragedias, con escenas divertidísimas y con momentos de gran emoción, como nos cuentan desde la editorial, en la que se entrecruzan un sinfín de historias fascinantes–, nos asomamos a una ciudad, París, en la década de los años veinte, en la que la una pareja, la formada por Émile y Louise Lecouvreur, deciden empezar una nueva vida adquiriendo un pequeño y pintoresco hotel.

A partir de entonces la vida de los protagonistas girará en torno a este establecimiento y sus moradores. Las humildes habitaciones que regentan nos ofrecen un completo retrato del París más evocador: hombres y mujeres que llegan del campo buscando una vida mejor, empujados por sus sueños y por las vibrantes posibilidades que ofrecen las calles de la gran ciudad; jóvenes y ancianos que nunca han dejado esas mismas calles y que nos recuerdan a otros grandes personajes de la literatura de Balzac, Zola o Vallès…

Se trata, pues, de una novela que nos mantiene expectantes y en la que su autor nos cuenta de manera extraordinaria la vida y la muerte en un pequeño pero mítico hotel que perteneció a sus padres y que hoy en día aún sigue en pie. Ese establecimiento y el libro que el lector tiene en sus manos inspiraron a Marcel Carné la inolvidable película, con guión de Jacques Prévert y protagonizada por Annabella y  Jean-Pierre Aumont, de igual título.

Página web del actual Hotel del Norte, París.