Pepitas de Calabaza y Fulgencio Pimentel nos traen el primer tomo de las "obras completas" de Rafael Azcona en La Codorniz: '¿Por qué nos gustan las guapas?'

¿Por qué nos gustan las guapas?

Todo Azcona en La codorniz. Volumen I: (1952-1955).

Rafael Azcona.

Prólogo de Bernardo Sánchez.

Edición de Víctor Sáenz-Díez, José Ignacio Foronda y Julián Lacalle.

Pepitas de Calabaza y Fulgencio Pimentel.

Formato: encuadernado en cartoné. 22 x 15 cm.

512 páginas.

PVP: 30€.

Fecha de publicación: noviembre de 2012.

Entre 1952 y 1958, periodo que transcurre entre su marcha de Logroño y sus comienzos como trabajador de la industria cinematográfica, Rafael Azcona (Logroño, 1926-Madrid, 2008) colaboró en diversas y variopintas publicaciones, pero lo hizo principalmente en la mítica La Codorniz, de cuyo equipo de redacción llegó a formar parte durante un tiempo.

Ahora, cuatro años después de que uno de los grandes guionistas del cine español (aunque él prefiriese definirse diciendo: “digamos que uno de los más persistentes”) nos abandonara, y con el objetivo de recuperar su obra “perdida” y de ofrecer a los lectores no solo una extensa muestra del talento humorístico de Azcona sino también un retrato coral de la sociedad española de los años cincuenta, Pepitas de Calabaza, en colaboración con Fulgencio Pimentel, han reunido en tres volúmenes todas las colaboraciones firmadas (con su propio nombre o bajo seudónimo) que publicó Azcona en la que fuera “la revista más audaz para el lector más inteligente”.

Contemporáneas de sus textos para la gran pantalla más celebrados, estas aportaciones no se limitan a ser las creaciones de un joven desbordado de talento que huye de la mediocridad provinciana para ganarse la vida como escritor, sino que son también el humus enriquecido de sus posteriores aportaciones tanto cinematográficas como literarias.

Además de los lúcidos y desternillantes textos, se recoge aquí buena parte de su obra como dibujante, incluyendo aquellos chistes y viñetas que en su tiempo resultaron todo un fenómeno editorial, como los que conforman la serie de “el Repelente Niño Vicente”.

Uno de los dibujos-chiste de Rafael Azcona en 'La Codorniz'

El lector que se acerque a esta colección, de la que acaba de aparecer publicado el primer volumen, se encontrará con el humor delicado y cáustico a la vez que caracterizaba la obra de un “humorista” –en la más amplia acepción del término–que construye en ocasiones un mundo al revés, siempre gamberro y siempre amable, del que no escapan sus divertidas obsesiones: un humor, como nos recuerdan sus editores, “en el que se hacen patentes las lecturas de Jonathan Swift y de otros clásicos de la irreverencia, y que le permite asomarse a la realidad y, acompañado de una mirada incrédula y única, descubrir el deslumbrante brillo de una sociedad completamente gris.”

Nacido en 1926 en un pueblo llamado Logroño, sede y plaza de Pepitas, una de las editoriales más interesantes que han aparecido en el panorama español en los últimos años, Azcona es reconocido como uno de los más brillantes guionistas europeos de la segunda mitad del siglo XX. Sus más de ochenta guiones –incluyendo los de películas como El pisito, El cochecito, El verdugo, Plácido, La escopeta nacional, Belle Époque o La lengua de las mariposas– y un puñado de novelas que se revalorizan con el paso del tiempo (como Los muertos no se tocan, nene, Los europeos o Los ilusos, entre otras), sumado a su ingente producción de humor urgente, lo convierten en una figura imprescindible de la cultura española contemporánea. Pocos comprendieron en el último siglo tan bien como él que “Sin el humor habríamos desaparecido hace tiempo”.

Los otros dos volúmenes, que aparecerás a lo largo de 2013, son:

Volumen II: ¿Son de alguna utilidad los cuñados? (1956-1958)

Volumen III: Repelencias. Dibujos y viñetas (1953-1956)